Este proyecto parte de la base de las necesidades que tienen las personas con VIH en el mercado laboral. Se conoce que una persona con VIH tiene tres veces más posibilidades de encontrarse sin trabajo. En este sentido, el nivel de desempleo se sitúa en este colectivo en el 57%, a pesar del elevado porcentaje que desearía tener trabajo. En lo que se refiere a Canarias se estima que 8.000 personas tienen el virus VIH y un 13% no es conocedor de ello. Aunque no se conoce la división por provincia ni por isla lo cierto es que estas personas, igual que el resto, tienen el derecho a un acceso al trabajo digno garantizado por la Constitución Española. Sin embargo, las personas con VIH no sólo ven mermado ese derecho, sino que los que trabajan lo hacen, a menudo, bajo una situación de presión social e invisibilidad. Por ello, el proyecto cubre tanto la necesidad de sensibilizar como la de generar herramientas en las personas con VIH referente a búsqueda activa de empleo. La necesidad que pretende abordar el proyecto en un contexto social en el que el perjuicio , el estereotipo y la falta de información con respecto al VIH generan la problemática a tratar.